¡Dios mío, está lleno de estrellas!

El Endeavour en su último viaje. Clic en la imagen para verla más grande en Astronomy Picture of the Day.

Hace algún tiempo «desvelábamos» una de las mayores conspiraciones mundiales basándonos, en parte, en que no se ve ni una sola estrella en ninguna de las fotografías tomadas desde el espacio —o sobre la Luna— en la que aparezca un planeta o satélite.

Y entonces viene la NASA y nos sorprende con esta toma del Endeavour en órbita sobre la Tierra donde se ve la cara nocturna de nuestro planeta rodeada de infinidad de estrellas. ¿Dónde está el truco? Pues fíjense en las luces de las ciudades sobre la superficie de la Tierra: están movidas, señal de que el tiempo de exposición es largo, de unos cuantos segundos, los necesarios para que las estrellas —mucho más débiles que las luces de las ciudades— se vean, pero no lo bastante como para que la superficie del planeta sature la foto —si hubiera sido la cara iluminada, otro gallo habría cantado.

Y un detalle que me encanta: atención a la atmósfera, esa fina capa anaranjada sobre la superficie del planeta. Incluso a través de ella se pueden ver estrellas, y no muchas menos que fuera, lo que da una idea de lo poco que nuestra atmósfera atenúa la luz de las estrellas en el rango espectral en el que nuestros ojos funcionan (vamos, que desde la Luna no veríamos muchas más estrellas que desde la Tierra, ni mucho más brillantes).

Acerca de Miguel Santander

Tras el Horizonte de Sucesos
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Una respuesta a ¡Dios mío, está lleno de estrellas!

  1. Hallucigenia dijo:

    Propongo otra conspiración: ese planeta no es la Tierra, sino algún planeta de la galaxia de Andrómeda… Estoy convencido: la atmósfera de la Tierra no tiene ese color, ni siquiera poniendo miles de lámparas de argón, por dios! Los viajes intergalácticos comenzaron hace tiempo, pero lo han mantenido oculto… Vaya con los mercenarios de la ciencia oficial!

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