Eficiencia energética, dos palabras mágicas que últimamente parecen estar en todas partes: publicidad, legislación, actividades formativas… A priori parece sensato pensar que invertir tiempo y dinero en la mejora de la eficiencia energética de un producto siempre será beneficioso para el medioambiente. ¿Es esto cierto? ¿Es siempre el camino de la eficiencia energético el camino correcto?
Así comienza una entrada de Nergiza sobre eficiencia energética y a la que nos han invitado a Julián Estévez y a mí para dar nuestra opinión. Pueden leer la entrada completa aquí.